Súplica ante la enfermedad - (súplica número XV de Sahifa as-Sayyadiya)

Súplica ante la enfermedad - (súplica número XV de Sahifa as-Sayyadiya)

1. ¡Oh, Dios! Alabado seas Tú por la salud física de la cual aún disfrutaba, y Alabado seas Tú por la enfermedad que has hecho surgir en mi cuerpo.

2. Pues desconozco cuál de estos dos estados es el mejor para agradecerte y cuál de estos dos momentos es el más digno para alabarte.

3. El tiempo de salud en el cual gozaba de Tus mercedes agrada­bles y puras a través de las cuales me has dado energías para buscar Tu complacencia y Tu favor, en el cual me habías dado fuerzas para triunfar en Tu obediencia.

4. O el tiempo de enfermedad en el cual me pruebas con ella, en el cual me envías mercedes, como regalo (se refiere a las dolen­cias padecidas) para mermar el peso de los pecados sobre mi espalda, para purificarme de las malas acciones que he cometi­do, para despertar y llegar al arrepentimiento y para que, recor­dando la gracia anterior (es decir, la salud), se borren mis grandes pecados.

5. Mientras tanto, en el ínterin de mi enfermedad, existen obras buenas y puras que registran para mí los dos escribas (los ánge­les que anotan las acciones), obras en las que el corazón no pensaba ni la lengua mencionaba, ni los miembros sufrieron nada para realizarlas, sino que provienen de Tu favor y Tu beneficencia hacia mí (y se registran en compensación por lo que la enfermedad me impidió hacer).

6. ¡Oh, Dios! Bendice, pues, a Muhammad y a su familia, y haz que ame aquello que Te complace para mí; facilítame aquello que me has asignado; purifica todas las impurezas que han sur­gido de mí y borra de mí todo el mal que he realizado anteriormente. Hazme degustar la dulzura de la salud y permíteme sa­borear el deleite de estar sano. Hazme salir de esta enfermedad hacia Tu dispensa y trasládame de esta caída (estado grave de enfermedad) hacia Tu perdón. Rescátame de mi calamidad hacia Tu misericordia y cúrame de esta grave enfermedad hacia Tu alivio.

7. Porque Tú ciertamente eres Aquel que hace beneficencia brin­dando y otorgando grandes mercedes sin la condición de ser merecedor de ellas. Pues ciertamente Tú eres Quien otorga y eres generosísimo, el dueño de la majestuosidad y la dignidad absolutas.

الدعاء الخامس عشرمن صحیفه السجادیة: وكان مِنْ دُعائه(عليه السلام) إذا مرض أو نزل بِهِ كَرْبٌ أو بَلِيَّةٌ

أللَّهُمَّ لَكَ الْحَمْدُ عَلَى مَا لَمْ أَزَلْ أَتَصَرَّفُ فِيهِ مِنْ سَلاَمَةِ بَدَنِي، وَلَكَ الْحَمْدُ عَلَى مَا أَحْدَثْتَ بِيْ مِنْ عِلَّة فِي جَسَـدِي. فَمَا أَدْرِي يَـا إلهِي، أَيُّ الْحَالَيْنِ أَحَقُّ بِالشُّكْرِ لَكَ، وَأَيُّ الْوَقْتَيْنِ أوْلَى بِالْحَمْدِ لَكَ، أَوَقْتُ الصِّحَةِ الَّتِي هَنَّـأْتَنِي فِيهَا طَيِّبَاتِ رِزْقِكَ، وَنَشَّطْتَنِي بِهَا لابْتِغاءِ مَرْضَاتِكَ وَفَضْلِكَ، وَقَوَّيْتَنِي مَعَهَا عَلَى مَـا وَفَّقْتَنِي لَهُ مِنْ طَـاعَتِـكَ أَمْ وَقْتُ الْعِلَّةِ الَّتِي مَحَّصْتَنِي بِهَا، وَالنِّعَمِ الَّتِي أَتْحَفْتَنِي بِهَا تَخْفِيفاً لِمَا ثَقُلَ بِهِ عَلَى ظَهري مِنَ الْخَطِيئاتِ وَتَطْهيراً لِمَا انْغَمَسْتُ فيهِ مِنَ السَّيِّئاتِ،

وَتَنْبِيهاً لِتَنَاوُلِ التَّوْبَةِ، وَتَذْكِيراً لِمَحْوِ الْحَوْبَةِ بِقَدِيمِ النِّعْمَةِ، وَفِي خِلاَلِ ذَلِكَ مَا كَتَبَ لِيَ الْكَاتِبَانِ مِنْ زَكِيِّ الاعْمَالِ، مَا لا قَلْبٌ فَكَّرَ فِيهِ، وَلا لِسَانٌ نَطَقَ بِهِ وَلاَ جَارِحَةٌ تَكَلَّفَتْهُ بَلْ إفْضَالاً مِنْكَ عَلَيَّ، وَإحْسَاناً مِنْ صَنِيعِـكَ إلَيَّ. أللَّهُمَّ فَصَلِّ عَلَى مُحَمَّـد وَآلِـهِ وَحَبِّبْ إلَيّ مَـا رَضِيتَ لِي، وَيَسِّرْ لِي مَا أَحْلَلْتَ بِيْ، وَطَهِّرْنِي مِنْ دَنَسِ مَا أَسْلَفْتُ، وَامْحُ عَنِّي شَرَّ مَا قَـدَّمْتُ، وَأَوْجِدْنِي حَلاَوَةَ الْعَافِيَةِ، وَأَذِقْنِي بَرْدَ السَّلاَمَةِ وَاجْعَلْ مَخْرَجِي عَنْ عِلَّتِي إلَى عَفْوِكَ، وَمُتَحَوَّلِي عَنْ صَرْعَتِي إلَى تَجَاوُزِكَ، وَخَلاصِي مِنْ كَرْبِي إلَى رَوْحِكَ، وَسَلاَمَتِي مِنْ هَذِهِ الشِّدَّةِ إلَى فَرَجِكَ، إنَّكَ الْمُتَفَضِّلُ بِالاِحْسَانِ، الْمُتَطَوِّلُ بِالامْتِنَانِ، الْوَهَّابُ الْكَرِيمُ، ذُو الْجَلاَلِ وَالاكْرَامِ.