La gran revolución de Fátima Zahra (P) y sus valores

Un estudio sobre la vida de Fátima Zahra (P), la hija inmaculada del Profeta del Islam

Por: Allama Baqir Sharif Qurashi

Fátima, la hija del Profeta (PB), desde muy niña vivió la gran revolución islámica junto a su padre, el maestro de la creación, lideró e hizo un cambio en la sociedad de Meca. Esta gran revolución se basó en destruir las creencias erróneas de la gente que se fundaban en la idolatría y el politeísmo. Adoraban ídolos y no a Su Creador, ofrecían sacrificios para estos ídolos a cambio de que satisficieran sus necesidades. Las tribus de Quraish colgaban sus ídolos en las paredes de la Ka’ba como signo de orgullo.

El Profeta (PB) desbarató a los ídolos de Quraish y llamaba a su destrucción y a la purificación de la Ka’ba. Los historiadores dicen que Quraish tenía alrededor de trescientos ídolos, de estos los de más importancia y de mayor posición para ellos eran Hubal, Lat, Uzza y Manat.

La gente de Quraish eran devotos a estos ídolos y creían en ellos ciegamente. Ellos los invocaban sumisa y devotamente. Abu Sufyan, el jefe de la familia Omeya y una de las cabezas de Quraish, era el más devoto de Hubbal. Se aterrorizó cuando vio al profeta circunvalando la Ka’ba y recitando el himno islámico “Labbayik Al-lahumma Labbayk (Aquí estoy mi Señor, Aquí estoy)”

Esto lo enloqueció y grito: “Gloria a Hubal”

El Profeta (PB) le dijo: “Oh Abu Sufyan, Dios es el más grande y glorificado”

Las gentes de Quraish eran muy creyentes en sus ídolos. Un grupo de ellos vino hasta donde el Profeta (PB) y le insinuaron que él adorara a los ídolos por un año y ellos adorarían a Dios el año siguiente. Entonces la sura Al-kafirun, fue revelada:

Di: Infieles

Yo no sirvo lo que vosotros servís,

Y nosotros no servís lo que yo sirvo.

Yo no sirvo lo que nosotros habéis servidos

Y vosotros no servís lo que yo sirvo

Vosotros tenéis vuestra religión y yo la mía. (Corán 109)

La gente de Quraish se alarmó y aún más cuando el Profeta (PB) anunció la destrucción de los ídolos para purificar la Kaaba. Ellos consideraron esto como una derrota para su creencia; por esto hicieron su mejor esfuerzo para resistirse y detener al profeta de cualquier forma.

Es mencionado que la resistencia y enemistad hacia el Profeta (PB) no fue solo porque destruyó a sus ídolos y se oponía a su adoración, sino que fueron otros factores detrás de estos:

SUS NOBLES VALORES

El Profeta (PB) había adoptado nobles valores y grandes ideales, los cuales elevan al hombre al más alto estatus. Estos valores e ideales eran diferentes a la conducta y moral de la gente de Quraish, y esto chocaba con sus intereses económicos. Los siguientes son algunos de estos valores:

La equidad

Entre los grandes principios que el Islam anunció se encontraba la equidad entre todas las personas sin importar su color, raza e idioma.

En el Islam no hay diferencia entre el pobre y el rico, el gobernante y el gobernado; todos son iguales ante la ley de Dios, en cuanto a sus derechos, deberes y responsabilidades. Dios ha dicho “Hombres, os creamos de un varón y un hembra, e hicimos de vosotros pueblos y tribus, para que os conozcáis unos a otros, para Dios el más noble entre vosotros es el que más le teme Dios es Omnisciente y está bien informado.” (Corán 49:13) el Profeta (PB) dijo: “No hay preferencia entre el árabe y el no árabe, entre el blanco y el negro, el mejor es el que teme a Dios. Esta equidad fue sagrada y agradable para el pobre y desvalido como Ammar ibn Yasir, Bilal al Habashi, Abdul-lah ibn Mas’ud y otros quienes crecieron definitivamente en el Islam. Mientras que los jefes, maestros y nobles de la Meca se rehusaron a estos principios y al Mensajero de Dios; por esto, torturaron cruelmente a quien creyera en el (profeta) de entre sus esclavos y los débiles.

La Liberación de la mujer

En la era pre islámica las mujeres sufrieron toda clase de opresión y maltrato. Ellas estaban privadas de todos sus derechos naturales. Las siguientes son algunas de estas opresiones en contra de la mujer:

Enterrar a las niñas vivas

La peor forma de opresión para todas las mujeres en la era preislámica fue el enterrar vivas a las niñas. Dios dice: “Cuando se le anuncia a uno de ellos una niña, se queda hosco y se angustia. (Corán 16:58) Algunas tribus, cuando sus mujeres daban a luz a una niña, se apresuraban a enterrarlas vivas. Había un famoso dicho entre ellos que era: “Enterrad vivas a las niñas es de nobleza”

Dios ha dicho: “Cuando se pregunte a la niña enterrada viva, qué crimen cometió para que la mataran. (Corán 81:8-9)”

Las mujeres estaban privadas de heredar

Otro procedimiento tiránico de la era pre-islámica en contra de las mujeres, era ser privarlas de la herencia dejada por su padre y esposo. Sin embargo el Islam abolió esto y legitimó este derecho, le concedió el mismo derecho del hombre en este asunto de la herencia y legado.

El Islam había honrado a la mujer haciéndola responsable de la educación y el de elegir a su esposo aunque con el consentimiento de su padre.

El Islam trata a la mujer de una manera noble y honorable, y esto era extraño para la gente de aquella época y lejos de sus modales.

Casarse con la viuda de su padre

Otra de las costumbres pre-islámicas era que cuando un hombre moría, su hijo mayor podría casarse con ella (madrastras y era de su propiedad) o de lo contrario él podía casarla con quien él quisiera y apropiarse de su dote.

El Islam había prohibido el matrimonio del hijo mayor de un hombre muerto con su madrastra, Dios dijo: “En adelante, no os caséis con las mujeres con que han estado casados vuestros padres. Sería deshonesto y aborrecible. ¡Mal camino!... (Corán 4:22)”, también ha prohibido apropiarse de la dote de una mujer. En la era pre-islámica, la gente tomaba a sus madrastas como una propiedad más. Y si querían se casaban con ellas o las casaban con otros y se tomaban la dote para sí, y las forzaban a permanecer solteras, hasta que ellos morían. El Islam había liberado a las mujeres de todas estas cosas y le otorgó una armadura de honor y dignidad.

La prohibición del adulterio

El adulterio era algo común en la era preislámica. Mu’awiyah ibn Abu Sufyan adscriben abiertamente la ilegitimidad Ziyad ibn Abih (significa Ziyad, hijo de su padre) a su padre quien había cometido adulterio con la madre de Ziyad.

El Islam prohibió el adulterio y lo considero como uno de los peores pecados. Por supuesto, esta prohibición contradecía la naturaleza de la mayoría de la gente de Quraish, quienes crecieron con estos vicios y pecados.

La prohibición de la usura

La misión del Profeta (PB) chocaba con los intereses de los capitalistas de Quraish, quienes dependían de la usura para incrementar su capital. La usura era común en toda la Meca. Al-Abbas ibn Abdul Muttalib era uno de los que practicaba la usura. El Islam había prohibido la usura y la consideraba uno de los pecados mayores, porque a causa de esta unos pocos se hacían muy ricos y la mayoría de la gente empobrecía y endeudaba.

La prohibición del alcohol

El vino era lícito en la era pre-islámica y gente de todas las clases lo consumía, el Islam prohibió y lo llamo riys (sucio, infama y abominable). Esta prohibición estaba en contra de los deseos y placeres de esta sociedad, por esto ellos se resistieron al Islam.

Luchar en contra de la pobreza

El Profeta (PB) se esforzó al máximo en erradicar la pobreza de la sociedad, porque esto era un desastre fatal. El Islam ha legislado algunos impuestos en ciertos campos: oro, plata, ovejas, vacas y camellos; y con estos se ayudaba a los pobres y necesitados. También impuso a los musulmanes un estilo de vida de unidad y solidaridad para con estos y otros remover la pobreza y la necesidad.

Expandir el Conocimiento

Una de los nobles valores que el Islam adoptó fue el de diseminar el conocimiento entre la gente y erradicar la ignorancia. El profeta hizo la búsqueda del conocimiento obligatoria para todos los musulmanes hombres y mujeres; por cierto, que ninguna nación podrá tener una posición considerable en el mundo sin haberse armado con el conocimiento y la ciencia.

Hay algunos nobles valores y grandes ideales que el Profeta (PB) trajo consigo y que eran extraños para la sociedad ignorante de la Meca, por esto la gente de la Meca de todas las clases se resistió al Profeta (PB) y trataron de apagar la luz de su misión.

EL TEMOR DE QURAISH

La gente de Quraish estaba aterrorizada por la misión del Profeta (PB), la cual causaría un cambio entre ellos. Sus esclavos y creyentes y discapacitados creyeron en esta misión porque el Islam abrió nuevos horizontes de dignidad y honor, trajo buenas nuevas del futuro y que ellos serían maestros de la sociedad y hombres con autoridad, mientras que los maestros serían esclavos y serviles.

Los débiles creyeron devotamente en el Islam y por esta razón fueron tratados con severidad, torturados salvajemente. Entre estos torturados estaba Yasir, Sumayyah y su hijo Ammar.

De todas formas los tiranos de Quraish se opusieron a la misión islámica por todos los medios que pudieron tales como:

Incitar a sus hijos (niños) que molestaran al Profeta

Quraish animaba a sus niños para que molestaran al Profeta (PB) y le tiraran piedras. Ellos hacían esto para excusarse ante Abu Talib, el tío del profeta y se defendían diciendo que eran sus hijos los que lo hacían. El Imam Ali (P) los castigaba y golpeaba. Era muy fuerte a pesar de que era un niño. El ataca a los otros niños, golpeándolos y pateándolos. Cuando el profeta salía, el Imam Ali (P) caminaba detrás de él y cuando los niños los veían, corrían asustados hacia sus padres.

Acusar al Profeta de locura

Uno de los trucos que utilizaron fue acusarlo de locura. Estos lo acusaron de locura porque él vino con una religión y leyes opuestas a sus creencias, las cuales estaban dominadas por la ignorancia y la estupidez. Ellos lo acusaban de locura mientras que él era una mente creativa y un cerebro pensante de la humanidad. Estas pretensiones no tuvieron éxito y la misión islámica se esparció rápidamente como la luz que alumbra la vía y aclara el camino.

Acusarlo de mago

Quraish esparció el rumor que el Profeta (PB) era un mago y que no había sido enviado del cielo tal y como el Faraón hizo con el profeta Moisés (P). Ellos acusaron al Profeta de mago, porque este les recitaba versos del Libro de Dios, el cual era como un milagro por su elocuencia y retórica. Esto tampoco tuvo éxito.

Torturar a los creyentes

Quraish vertió su rencor en deshabilitar a aquellos que anunciaban su fe en el Islam y también sobre otros jóvenes y mujeres.

Los castigaban brutalmente, torturaron a Yasir, Sumayyah y Ammar extremadamente, cuando el profeta pasaba por donde ellos y los veía lamentándose a causa del tormento, sentía mucha pena y decía: Sean pacientes o familia de Yasir, su recompensa es el paraíso.

Yasir y Sumayyah, fueron martirizados con el tormento de Quraish, pero su hijo Ammar fue salvado después de padecer severamente.

Los creyentes hombres y mujeres sufrieron toda clase de tortura hasta que se vieron obligados a emigrar de la Meca a Abisinia, donde fueron seguidos por Quraish para traerlos de regreso a la Meca y asesinarlos, pero el rey de Abisinia no respondió a las peticiones de Quraish y dejó que los emigrantes vivieran con seguridad en su país.

FÁTIMA (P) JUNTO A SU PADRE

Fátima vivió las calamidades que padeció su padre, la persecución y los daños por los que él pasó.

Algunos narradores dicen que Ibn Mas’ud dijo: “Un día, cuando el Profeta estaba rezando en la Ka’ba, Abu Yahl y un grupo de villanos Quraish estaban en la Ka’ba. Abu Yahl dijo a sus compañeros: ¿Quién de ustedes puede traer la placenta de camello de tal persona y ponerla sobre los hombres de Muhammad cuando se prosterne?”

Uno de ellos fue a traer la placenta con sangre y excremento y la puso sobre el Profeta (PB), mientras se prosternaba. Los villanos estallaron en risa. Ibn Mas’ud (se apresuró a quitarla) mientras el Profeta (PB) aún estaba prosternado. Alguien corrió a donde Fátima (P) y le contó lo sucedido, ella quitó la placenta y pidió a Dios en contra de los que hicieron esto. Cuando el Profeta (PB) termino la oración, invocó Dios, en voz alta en contra de estos malvados. El Profeta (PB) solía repetir su súplica tres veces cuando pedía a Dios por algo o en contra de alguien. Él dijo: “Oh Dios, te pido en contra de Quraish”.

Repitió esto tres veces, cuando ellos escucharon lo que pidió el Profeta pararon de reírse y se asustaron. Luego él dijo: “Oh Dios, te invoco en contra de Abu Yahl, Ibn Hisham, Utba ibn Rabi’a, Shaybah ibn Rabi’a, Walid ibn Utba, Umaya ibn Jalaf, Uqba ibn Abi Ma’it….

Ibn Sa’d dijo: “Por aquel que ha enviado a Muhammad, con la verdad, yo he visto aquellos a quienes el profeta pidió a Dios que castigara, los he visto caer el día de la Batalla de Badr y luego fueron arrojados al pozo”

[1]

Fátima (P) vivió junto a su padre y vio el sufrimiento y calamidades, que los villanos y pecadores de Quraish le propinaron, ella sufrió y temió por su padre.

 Quraish planea asesinar al Profeta (PB)

Cuando el profeta se afligió por la muerte de su tío Abu Talib, quien era su defensor y del Islam, no hubo ningún refugio en la Meca al cual él pudiese recurrir. Perdió el poder que lo defendía en contra de los tiranos y opresores de Quraish, y esto determinó su salida de la Meca rumbo a Medina donde se encontraba su apoyo y los guardias de su misión. Cuando Quraish se enteró de esto, temió que el profeta pudiera establecer un estado y un ejército fuerte, con el que luego se vengaría por los padecimientos y heridas que ellos le habían provocado. Por esto se reunieron en una conferencia en Dar an-Nadwa y discutieron los daños que enfrentarían si el Profeta abandonaba la Meca; todos acordaron en asesinarlo sin importar el costo que pagarían. Satanás estaba en la conferencia como lo mencionan los historiadores y él les sugirió que cuarenta hombres, cada uno de diferente tribu lo asesinaran y así todas las tribus participarían del asesinato, con esto todos los que apoyaban a Muhammad (PB) y los creyentes no podrían vengar su muerte.

Escogieron un día para esto y lo llamaron el día de “mazhamah” Dios reveló al profeta acerca de lo que la gente de Quraish estaba planeando en contra de él.[2]

La emigración del Profeta (PB) a Yazrib (Medina)

El día en que Quraish había determinado asesinar al Profeta llegó, los cuarenta hombres habían rodeado la casa del Profeta (PB), por todos los lados, llevando consigo sus espadas para despedazar el cuerpo del Profeta (PB) y apagar la luz de Dios. La tribu de Quraish quería vengar a sus ídolos y restaurar la posición social que habían perdido a causa de la misión islámica.

(ver la continuación en archivo pdf)

Fuente:  La Vida de Fátima Zahra (P)

Autor: Allama Baqir Sharif Qurashi

Editorial Elhame Shargh- 2014

Fundación Cultural Oriente

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Se permite copiar citando la referencia.

www.islamoriente.com

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[1] Sahih Muslim, Vol. 5, P. 180, Sahih al-Bukhari, Vol. 1, P. 132

[2] Imta’ al-Asma’, por Al-Maqrizi, Vol. 1, P. 38

[3] As-Seerah an-Nabawiyyah, por Ibn Katheer, Vol. 2, P. 296, As-Seerah an-Nabawiyyyah por Ibn Hisham, Vol. 2, P. 79

[4] Enciclopedia del Imam Amir al-Mu’minin, Vol. 1, P. 219

[5] Usd al-Ghaba, Vol. 4, P. 92

[6] Tareekh At-Tabari, Vol. 2, P. 80

[7] Sahih Muslim, Vol. 5, P. 178, Sahih al-Bukhari, Vol. 7, P. 19-20

[8] Thakha’ir al-Uqba, P. 47

[9] Sunan Abi Dawud, Vol. 3, P. 291, Musnad Ahmad Ibn Hanbal, Vol. 5, P. 275

[10] Al-Maghazi, Vol. 3, P. 1087

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