Hollywood y el sionismo: “lavadores de cerebros”

Sdenka Saavedra Alfaro[1]

Suena un poco irrisorio, pero de lo que debemos cuidarnos en la actualidad, no es sólo de los misiles que nos lanzan las redes sociales de comunicación, los ataques informáticos; es decir del internet como las páginas en la web, o de los propios correos, los emails; como lo señalan varios autores[2], porque este tipo de guerra es otra de las herramientas revolucionarias que se están empleando no sólo en conflictos armados, también en la cotidianidad de la vida. Sino y en especial debemos tener mucho cuidado del séptimo arte, sobre todo del cine “hollywoodense”, el cine sionista, definiéndolo como las producciones cinematográficas que abierta o subrepticiamente promueven los valores y los ideales del “sionismo”, o bien del supremacismo judío.

El “sionismo” es en primera instancia, el nacionalismo judío, y se ha convertido en un movimiento que ha logrado un alcance mundial, y cuya finalidad  suprema es la defender los interés judíos de toda índole; sean desde el punto de vista nacionalista, económico o político, aún a costa de los otros pueblos, transformándose así en una suerte de supremacismo judío[3].

Más del 90% por no decir el 100% de las producciones hollywoodenses contienen en mayor o menor medida mensajes que las inscriben en el registro del cine sionista, como lo señala Senger[4], las cuales contienen un trasfondo político en el que se incluyen mensajes (memes)[5] a través de los cuales se promueven valores e ideales judíos hacia los demás pueblos y razas.

Algunas películas de las muchísimas que existen contienen mensajes sionistas introducidos como lo dijimos que promueven subrepticiamente los valores e ideales judíos, y sobre todo, los objetivos para los gentiles, estamos hablando de: supremacismo judío, mesianismo, integrismo, multirracialismo, mestizaje y relaciones interraciales como antirracismo, eurofobia, igualitarismo, homosexualismo, feminismo, hedonismo; etc…

El supremacismo judío es la creencia que afirma que el pueblo judío es superior a todos los pueblos y que debe tener el control en todas las órdenes. Y según David Duke  en su libro “Supremacismo Judío” esta creencia religiosa[6]se ha llegado a identificar con el judaísmo político nacionalista o sionismo, deriva de que el pueblo judío es el pueblo elegido de Dios y de que todos lo demás pueblos que habitan la tierra no son humanos y no tienen alma, y que fueron creados por él para servir a los sionistas, creencia religiosa que tiene sus fuentes tanto en la Torá como en el Talmud.

En el Talmud [7]encontramos por ejemplo:

“El Mesías (aún esperado por los hebreos) dará a los judíos el gobierno real del mundo; todos los pueblos los servirán y todos los reinos les serán sometidos”. (Naschim, en el libro kethubot, fol. 111b).

O en la Torá[8], por ejemplo es posible leer este versículo:

“Así; pues, extermina todos los pueblos que “YHVH”, tu Dios, pondrá en tus manos. No tengas piedad de ellos, ni sirvas a sus dioses para que ellos no sean la causa de tu rutina”. (Deuteronomio 7:16).

El efecto que supone la enorme influencia de la mentalidad sionista, a través del cine y la televisión en las habituales conductas psicópatas y delincuenciales de la gente común en la actualidad es altísimo; así lo dice Duke[9] , pues no nos olvidemos que el séptimo arte influye contundentemente en los jóvenes, en  los niños, al transmitir valores y al representar conductas de la vida cotidiana, como por ejemplo: “La Violencia”. Todo lo contrario a lo que la cosmovisión y filosofía del islam propone.

Las películas hacen más que entretener, ofrecen posiciones al sujeto, movilizan deseos, nos influye inconscientemente y nos ayuda a construir la cultura. El cine no sólo produce imágenes; sino ideas, ideologías que conforman tanto las identidades individuales como nacionales; actúa en el campo simbólico, en la creación y recreación de representaciones, de imágenes significantes, construyendo una realidad virtual, podemos decir que el “Cine” ejerce sus influencias sobre el individuo en formación, en la construcción de su identidad, convirtiéndose en un agente de socialización – indirecta; pero de gran importancia, de niños – jóvenes y adultos[10].

El cine moderno contemporáneo, influido como está por el sionismo, tiene una inclinación a la violencia, la criminalidad, la promiscuidad y toda esa clase de conductas que linda con lo ilegal, reafirmando el supremacismo judío. Ese es el lavado de cerebro que continúan realizando, que los niños no obedezcan  a los padres, divorcios, pretensiones sexuales; en fin todos los antivalores que están influyendo a los jóvenes, adolescentes y niños sobre todo en occidente, cosa que el islam condena.

Comenzando por la película “La lista de Schindler”, cuyos directores son judíos (Steven Spielberg y Branko Lustig), que cuentan la historia del Holocausto donde los judíos aparecen como víctimas, donde se reafirma el supremacismo judío en su totalidad. “Supermán” el super héroe, creado por los judíos Jerry Siegel y Joe Shusten, patrocina el mesianismo[11]. “Harry Potter” reafirma el mesianismo, la eurofobia[12], el igualitarismo, el antirracismo, el multirracialismo. “The Matrix” transmitiendo la eurofobia, el mesianismo, el multirracialismo. “Avatar” que aunque usted no lo crea también su enfoque es sionista, ya que promueve la eurofobia, el mesianismo y el multirracialismo. Y en este 2014 tenemos a la película “12 años de esclavitud”, producida por los judíos Jeremy Kliner, Bill Pohlad y Arnon Milchan; que cuenta la historia de cómo los malvados blancos esclavizaban a los negros, producción ganadora de 3 Oscar. Si continuamos la lista se hace inmensa; pero hasta ahora estamos esperando una película sobre Israel y el exterminio a los Palestinos.

Es que es obvio y debemos señalarlo; pues de acuerdo a Tom Tugend[13] en Hollywood la mayoría de los actores, directores y productores son judíos. Entre los actores famosos conocidos se encuentran: Sean Penn, Sara Yessica Parker, Sylvestrer Stallone, Sara Yessica Parker, Wynona Ryder, Harrison Ford, Scarlett Johansson, Woddy Allen, Tony Curtis, Adam Sandler; entre muchos otros[14].

Y según el Diario Suizo NZZ am Sonntang, casi todos los estudios cinematográficos en EE.UU están bajo el dominio de los judíos, e incluso, la mayoría de los miembros del jurado del Premio Oscar.

“Casi la totalidad, de las grandes productoras cinematográficas de EE.UU son judías o están en manos de ellos”.[15] Entre ellas: Warner Bros, dirigida por Barry Meyer, Metro Goldwun Mayer, dirigida por Frank Roserfelt y Daniel Melnick, Columbia Pictures, dirigida por David Begelman, Universal Pictures, por Lew Wasserman y Jennings Long, Paramount Pictures ,y  ahora el conglomerado de medios de comunicación más grande de hoy que es Walt Disney, irónicamente en la actualidad está siendo dirigida por personas de origen judío; es decir que no se salvan las películas dirigidas a los más pequeños de la casa, esto sí deja mucho qué pensar, pues el adoctrinamiento mental lo están realizando como lo señalamos anteriormente a partir de la violencia, la incitación a la criminalidad, los antivalores, y toda clase de conductas que pervierten a los niños y a los jóvenes, promoviendo la destrucción occidental alabando la homosexualidad, el lesbianismo y así promoviendo su mensaje sionista.

Aprendamos a leer entre líneas,  lo que el lenguaje de la imagen nos quiere transmitir e inculquemos a nuestros hijos e hijas los verdaderos valores como lo señala el islam controlando sus actividades de ocio, censurándoles lo que es malo, principalmente enseñándoles a poner un límite a estos ataques sionistas desde temprana edad. No formemos parte de la destrucción del mundo.

 

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