El ejemplo de quien dispone la sabiduría en quien no está calificado para ello - 3

9365. عيسى بن مريم (عليه السلام): يا مَعشَرَ الحَوَارِيِّينَ، لَا تُلقُوا اللُّولُؤَ لِلخِنزِير، فَإِنَّهُ لَا يَصنَعُ بِهِ شَيئاً، و لا تُعطُوا الحِكمَةَ مَن لا يُرِيدُها، فَإِنَّ الحِكمَةَ أَحسَنُ مِنَ اللُّؤلؤ، و مَن لا يُرِيدُها أَشَرُّ مِنَ الخِنزِيرِ.

9365. Jesús hijo de María (a.s.): ¡Oh Apóstoles! No arrojéis la perla al cerdo, puesto que éste no hace nada con ella, y no deis la sabiduría a quien no la quiere puesto que la sabiduría es mejor que la perla, y quien no la quiere es peor que el cerdo.

El ejemplo de quien dispone la sabiduría en quien no está calificado para ello - 2

9364. عيسى بن مريم (عليه السلام): إِنَّ لِلحِكمَةِ أَهلاً، فَإِن وَضَعتَها فِي غَيرِ أَهلِها ضَيَّعتَ و إِن مَنَعتَها مِن أهلِها ضَيَّعتَ، كُن كَالطَّبِيبِ يَضَعُ الدَّواءَ حَيثُ يَنبَغِي.

9364. Jesús hijo de María (a.s.): Ciertamente que la sabiduría tiene su gente; si la dispones en quienes no están calificados para ella, pierdes, y si la deniegas a quienes están calificados para ella [también] pierdes. Sé como el médico que coloca el remedio donde debe ser.

El ejemplo de quien dispone la sabiduría en quien no está calificado para ello - 1

9363. عيسى بن مريم (عليه السلام) - أَنَّهُ كانَ يَقُولُ -: إِنَّ التّارِكَ شفاءَ المَجرُوح مِن جُرحِهِ شَريكٌ لِجارِحهِ لا مَحالَةَ، و ذلِكَ أَنَّ الجارِحَ أَرادَ فَسادَ المَجرُوحِ و التّارِكَ لِإِشفائِهِ لَم يَشَأ صَلاحَهُ، فَإِذا لَم يَشَأ صَلاحَهُ فَقَد شاءَ فَسادَهُ اضطِراراً؛ فَكَذلِكَ لا تُحَدِّثُوا بِالحِكمَةِ غَيرَ أَهلِها فَتَجهَلُوا، و لا تَمنَعُوها أَهلَها فَتَأثِمُوا، و ليَكُن أَحَدُكُم بِمَنزِلَةِ الطَّبِيبِ المُداوِي إِن رَأى‏ مَوضِعاً لِدَوائِهِ و إِلّا أَمسَكَ.

9363. Jesús hijo de María (a.s.): -Solía decir-: Quien deja sin curar la lesión del herido, sin lugar a dudas es socio de quien lo hirió, puesto que quien lo hirió quiso dañar al herido, y quien dejó de curarlo no quiso que se compusiera; entonces, si no desea que se componga, necesariamente quiso hacerle daño. Asimismo, no enseñéis la sabiduría a quienes no están calificados para ello puesto que seríais unos necios, y no la deneguéis a quienes están calificados para ella puesto que cometeríais un pecado, sino que cada uno de vosotros sea como el médico terapeuta, que si ve un lugar para su medicina [lo cura], y si no, se abstiene.

El ejemplo de la sabiduría en el corazón - 2

9362. عيسى بن مريم (عليه السلام): إِنَّ اللَّهَ يُحيِي القُلُوبَ المَيتَةَ بِنُورِ الحِكمَةِ، كَما يُحيِي الأَرضَ المَيتة بِوابِلِ المَطَرِ.

9362. Jesús hijo de María (a.s.): Ciertamente que Dios vivifica los corazones muertos mediante la luz de la sabiduría, tal como vivifica la tierra muerta mediante la lluvia torrencial.

El ejemplo de la sabiduría en el corazón - 1

9361. عيسى بن مريم (عليه السلام): بِحَقٍّ أَقُولُ لَكُم: إِنَّ الصَّقالَةَ تَصلُحُ السَّيفَ و تَجلُوهُ، كَذلِكَ الحِكمَةُ لِلقَلبِ تَصقُلُهُ و تَجلُوهُ، وهِيَ فِي قَلبِ الحَكِيمِ مِثلُ الماءِ فِي الأَرضِ المَيتَةِ تُحيِي قَلبَهُ كَما يُحيِي الماءُ الأَرضَ المَيتَةَ، و هِيَ فِي قَلبِ الحَكِيمِ مِثلُ النُّورِ فِي الظُّلمَةِ يَمشِي بِها فِي النّاسِ.

9361. Jesús hijo de María (a.s.): En verdad os digo: Ciertamente que el pulido repara la espada y le da brillo. Asimismo es la sabiduría para el corazón: lo pule y le da brillo. La sabiduría en el corazón del sapiente es como el agua en la tierra muerta; revive su corazón tal como revive el agua la tierra muerta. La sabiduría en el corazón del sapiente es como la luz en la oscuridad mediante la cual camina entre la gente.

El ejemplo del corazón del sapiente - 1

9360. عيسى بن مريم (عليه السلام): إِنَّهُ لَيسَ عَلى‏ كُلِّ حالٍ يَصلُحُ العَسَلُ فِي الزِّقاقِ؛ و كَذلِكَ القُلُوبُ لَيسَ عَلى‏ كُلِّ حالٍ تُعمَرُ الحِكمَةُ فِيها. إِنَّ الزِّقَّ ما لَم يَنخَرِق أَو يَقحَل أو يَتفَل‏ فَسَوفَ يَكُونُ لِلعَسَلِ وِعاءٌ؛ و كَذلِكَ القُلُوبُ ما لَم تَخرِقَها الشَّهَوات و يُدَنِّسهَا الطَّمَعُ و يَقسُهَا النَّعِيمُ فَسَوفَ تَكُونُ أَوعِيَةً لِلحِكمَةِ.

9360. Jesús hijo de María (a.s.): No es así que en todos los casos el odre es adecuado para la miel. Asimismo son los corazones, no es así que en todos los casos se erige la sabiduría en ellos. Mientras que el odre no se desgarre, ni se seque o huela mal, entonces podrá ser recipiente para la miel. De la misma manera, mientras las pasiones no desgarren los corazones, ni la codicia los contamine, o la dicha y bienestar no los endurezcan, serán recipiente para la sabiduría.

El ejemplo de los sabios del mal - 1

9359. عيسى بن مريم (عليه السلام): مَثَلُ عُلَماءِ السُّوءِ مَثَلُ صَخرَةٍ وَقَعَت عَلى‏ فَمِ النَّهرِ، لا هِيَ تَشرَبُ الماءَ، وَ لَا هِيَ تَترُكُ المَاءَ يَخلُصُ إِلَى الزَّرعِ.

9359. Jesús hijo de María (a.s.): El ejemplo de los sabios del mal es como el ejemplo de una roca que está situada en la embocadura del río; ni bebe el agua, ni permite que el agua llegue a la siembra.

El ejemplo del sabio que no actúa [según lo que sabe] - 4

9358. عيسى بن مريم (عليه السلام): ماذا يُغنِي عَنِ البَيتِ المُظلِمِ أَن يُوضَعَ السِّراجُ فَوقَ ظَهرِهِ و جَوفُهُ وَحشٌ مُظلِمٍ؟! كَذلِكَ لا يُغنِي عَنكُم أَن يَكُونَ نُورُ العِلمِ بِأَفواهِكُم و أَجوافُكُم مِنهُ وَحشَةٌ مُعَطَّلَةٌ!

9358. Jesús hijo de María (a.s.): ¡¿De qué le sirve a la casa oscura que se coloque una lámpara sobre su techo en tanto su interior está deshabitado y oscuro?! Asimismo, no os sirve que la luz del conocimiento esté en vuestras bocas en tanto que vuestro interior está deshabitado y desprovisto de él.

El ejemplo del sabio que no actúa [según lo que sabe] - 3

9357. عيسى بن مريم (عليه السلام): ما أَكثَرَ ثِمارَ الشَّجَرِ وَ لَيسَ كُلُّها يَنفَعُ و يُؤكَلُ! و ما أَكثَرَ العُلَماء و لَيسَ كُلُّهُم يَنتَفِعُ بما عَلِم! و ما أَوسَعَ الأَرضَ و لَيسَ كُلُّها تُسكَنُ! و ما أَكثَرَ المُتَكَلِّمِينَ وَ لَيسَ كُلُّ كَلَامِهِم يُصَدَّقُ! فَاحتَفظُوا منَ العُلَماءِ الكَذَبَةِ الَّذينَ عَلَيهِم ثِيابُ الصُّوفِ، مُنَكِّسِي رُؤُوسِهِم إِلَى الأَرضِ يُزَوِّرُونَ بِهِ الخَطايا، يَرمُقُونَ مِن تَحتِ حَواجِبِهِم كَما تَرمُقُ الذّئابُ، و قَولُهُم يُخالِفُ فِعلَهُم. و هَل يُجتَنى‏ مِنَ العَوسَجِ العِنَبُ، و مِنَ الحَنظَلِ التِّينُ؟! و كَذلِكَ لا يُؤَثِّرُ قَولُ العالِمِ الكاذِبِ إلّا زُورَاً، وَ لَيسَ كُلُّ مَن يَقُولُ يَصدُقُ.

9357. Jesús hijo de María (a.s.): ¡Qué muchos son los frutos de los árboles, aún cuando no todos ellos benefician y son comibles! ¡Y qué muchos son los sabios, aún cuando no todos ellos se benefician de lo que saben! ¡Y qué vasta es la Tierra, aún cuando no toda ella es habitable! ¡Y qué muchos son los que hablan, aún cuando no todas sus palabras son creíbles!Así pues, protegeos de los sabios mentirosos que ...

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